La reputación es el activo más valioso de todas las empresas, pero es el más fácil de destruir por la percepción pública Cuando una organización tiene pérdida de reconocimiento y admiración por parte de los clientes y la comunidad, sus clientes disminuyen y sus ingresos se ven afectados.
La Ley 1480 del 2011 o Estatuto del Consumidor que entró en vigencia en el 2012, ha revolucionado el impacto de una mala gestión de los clientes.
En tres años de vigencia de la ley, más de 10 mil empresas en Colombia han sido multadas con un monto de $1 Billón de pesos por la Superintendencia de Industria y Comercio por publicidad engañosa.
40 mil reclamaciones de consumidores contra empresas se recibieron en el 2015 en la SIC mientras que en el 2012 eran 10 mil y el crecimiento es exponencial año tras año.
En los índices de satisfacción medidos por CIV, la quejas y reclamos se duplicaron con la entrada en vigencia de la Ley 1480.
Las empresas sancionadas se ven cada vez más expuestas a nivel mediático incrementando su riesgo reputacional.